La Sierra de Gredos, un tesoro natural en el corazón de España, ha transformado su primera Ruta de Tapas en un emotivo homenaje a la resiliencia de su gente y la riqueza de su cocina. Tras un verano marcado por graves incendios que afectaron a la región, esta iniciativa gastronómica emerge como un símbolo de la fuerza y la esperanza de sus pueblos.

La majestuosa Sierra de Gredos, célebre por sus imponentes picos, su aire puro y su inigualable riqueza natural, acaba de escribir un nuevo y emocionante capítulo. Después de un verano difícil, en el que los incendios forestales azotaron diversas zonas de España, incluyendo focos importantes en la propia provincia de Ávila, la comarca lanza la primera edición de la Ruta de Tapas “Sabores serranos que dejan huella”. Esta cita fusiona lo mejor de la gastronomía local, la tradición y un profundo sentido de la solidaridad.

Un gesto culinario de amor por la tierra

Candeleda

Del 29 de septiembre al 5 de octubre, un total de 19 pueblos de Gredos Central se convertirán en el escenario de una ruta culinaria con un significado especial. En esta ocasión, cada tapa servida es mucho más que un simple bocado; es una declaración de amor por la tierra, un testimonio de la inquebrantable voluntad de sus habitantes y una invitación directa a apoyar a un territorio que mira al futuro con un renovado optimismo tras la tragedia del fuego.

Los municipios participantes son: Navacepeda de Tormes, Hoyos de Espino, Cumbre de Gredos, Navarredonda, San Martín del Pimpollar, Cuevas del Valle, Villarejo del Valle, Santa Cruz del Valle, San Esteban del Valle, Mombeltrán, El Arenal, Ramacastañas, Arenas de San Pedro, Guisando, Poyales del Hoyo, Candeleda, El Raso, El Hornillo y Madrigal de la Vera.1

A lo largo de esta ruta, los visitantes podrán descubrir un abanico de tapas elaboradas con auténtico sabor a sierra. La propuesta se centra en productos de proximidad, reviviendo recetas heredadas y sabores genuinos. Los protagonistas indiscutibles son los quesos con aroma a campo, las carnes de la sierra, los embutidos tradicionales y el inconfundible toque de las brasas, un guiño a la esencia serrana. Cada plato se prepara con el esmero de quienes han convertido la cocina en una verdadera forma de arraigo y resistencia.

Premios y el valor de la tradición y la innovación

Para fomentar la excelencia, la ruta reconocerá la creatividad y la tradición con dos galardones de peso, dotados cada uno con 5.000 €: el Premio a la tapa más innovadora y el Premio a la mejor tapa tradicional. Estos premios buscan poner en valor tanto la evolución culinaria como el respeto por las raíces gastronómicas de la sierra.

Sin embargo, el verdadero espíritu de esta primera edición trasciende la competición. El propósito central es reivindicar la riqueza de Gredos, brindar un apoyo directo a sus pueblos y mostrar que la forma más efectiva de cuidar un territorio es vivirlo, saborearlo y compartirlo.

Los organizadores han señalado que, en Gredos, “cada bocado es memoria y también futuro”. Con esta iniciativa, la comarca utiliza la cocina como un poderoso puente entre lo que se perdió y lo que aún queda por proteger y construir. La Ruta de Tapas por Gredos se consolida así como un ejemplo de que el turismo gastronómico puede ser un motor clave para la reconstrucción de un legado común, donde cada visita y cada consumición contribuyen directamente a la fuerza de un territorio resiliente.